La mayoría de las sociedades democráticas poseen una institución, encarnada generalmente en una persona de reconocida honradez y probado prestigio, con la responsabilidad de velar por los derechos de la ciudadanía frente a cualquier abuso de la administración. El defensor del pueblo es una institución que tiene como misión defender a los ciudadanos de posibles injusticias cometidas por los poderes públicos, así como vigilar el correcto desempeño de las tareas de los empleados del gobierno. Nacido en 1809 en Suecia, se lo conoce internacionalmente por su nombre en sueco: ombudsman. Finlandia, Dinamarca y Noruega fueron los siguientes estados en implantar esta figura, que después de la segunda guerra mundial se extendió por muchos países de todos los continentes. Los orígenes del defensor del pueblo se remontan a comienzos del siglo XVIII, cuando el rey Carlos XII de Suecia designó un Konugend Hogst Ombudsmannen para representarlo durante su ausencia en Rusia -con motivo...